Nuevos estudios indican que la tecnología puede ser un gran responsable.
Como bien conocemos, uno de los trastornos del sueño más comunes es el insomnio causado por la ansiedad, problemas cotidianos sin resolver y malos hábitos en las horas previas al sueño, gracias a esto, el organismo no es capaz de alcanzar una relajación que permita conciliar el sueño y traer repercusiones a nuestra vida diaria como el mal humor, bajo rendimiento y problemas de salud.
La tecnología cada vez está más presente en nuestras vidas, incluido el sueño, lo que ha generado que el uso de los teléfonos, tabletas y computadoras en horas previas a dormir, se convierten en un detonador más de este trastorno.
Basta con observar un poco la rutina antes de dormir, si tienes niños pequeños, usualmente piden permiso para utilizar la consola de videojuegos un rato más por la noche, seguramente verificas tu teléfono por si llegó un nuevo correo o hay alguna mención en tu red social favorita, al finalizar lo pones cerca de tu mano o bajo la almohada y en lo que intentas conciliar el sueño, recuerdas que no configuraste la alarma a tiempo, vuelves a tomar el teléfono y verificas nuevamente todo lo anterior, esto es un vicio que comienza a reflejarse en las horas de descanso.
El suenño y el descanso
Todos conocemos que nuestro cuerpo posee un reloj interno el cual se encarga de regular que nos dé sueño por la noche, la sensación de hambre y cosas que se asocian con la buena salud. La melatonina es la hormona que fomenta el sueño y está ligada a ciclos, el funcionamiento correcto depende de la cantidad de luz, nuestro cuerpo sabe que es hora de dormir cuando el ambiente se oscurece, pero este proceso se ve interrumpido por la luz que emiten la pantallas de teléfonos, tablets e incluso la televisión, eso puede interrumpir la liberación de la hormona, lo cual como consecuencia provocará cambios en el ritmo cardiaco y la dificultad para conciliar el sueño y el descanso.
Lso hábitos
Con tan solo un cambio en tus acciones puedes lograr un mejor descanso y sobre todo una buena salud.
- Establece una rutina en la que todos los días te acuestes y te levantes a la misma hora.
- Desconecta tu computadora, teléfono o televisión al menos una hora antes de acostarte.
- Relájate, toma un baño, lee un libro, etcétera, de esta manera puedes prepararte y dar una señal a tu cuerpo para que pueda prepararse para entrar en un estado de reposo.
- Un foco con luz tenue puede ser una buena compañera en tu habitación para la relajación.
- Libera tu lugar de descanso de la tecnología.
- Evita elementos “activadores” como hacer ejercicio físico, las bebidas, o comidas muy pesadas, esto con la finalidad de procurar un buen descanso.
- No alteres tu sueño con medicinas de ningún tipo. Si has probado todos los métodos mencionados y sigues teniendo problemas, acude a un médico especialista del sueño.
Via eltribuno.info
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario